‪Estoy yo/estás tú [estamos]‬
‪Por mi/por ti [estamos]‬
‪A pesar de mi/a pesar de ti [estamos]‬
‪Perezco/pereces [permaneceremos]‬
‪Triunfamos‬

igual a "d" sobre "t"

La velocidad aumenta
el cuerpo acelera
tu sonrisa estalla
la vida nos frena

‪Horas (minutos, a veces)‬
‪en que estoy hecho de oídos y palabras...
hecho de sitios
y de ti
y no de tiempo:‬
‪Le cuento al mundo‬
‪lo que (se) fue de mí‬
‪entre columpios y pedazos de tezontle‬

Dentro de tu auto
se derrama el silencio
a cuentagotas
hasta inundarlo todo

EseEPeTe etc.

Descubro con alegría
que somos esos momentos de los que estamos hechos
esos momentos que ya no vuelven
esos que son inesperados
improvisados
silenciosos y desapercibidos
Bulliciosos y amenos
que se escriben en blogs o en cuadernos
o en la memoria, intangibles
tan duraderos y efímeros
momentos que causan momentos
...inextinguibles...

—Preferiblemente—

Pretendamos que acabas de entrar
Digamos que vienes porque tienes algunos mareos
¿Qué debería decir? (¿Jodete y muérete?)
¿Cuándo fue la última vez?
No hay nada de qué preocuparse
Hablemos acerca de dosis y sus placenteras consecuencias
Acerca de cables mal conectados
Acerca de estupidas palabras aleatorias y pensamientos prejuiciosos
Acerca de esa misteriosa forma que utilizamos para probar (¿poner a prueba?) nuestras reacciones (las reacciones del otro)
Esperando la reflexión que viene y va
Esperando el último tic-tac del reloj

—preferably—

Let's pretend you just walked in

Let's say you're coming 'cause you have some dizziness

What would I say (F.O.A.D.?)?

When was the last time?

There's nothing to worry about

Let's talk about dosage and its pleasant consequences

About wrongly connected wires

About stupid random words and prejudiced thinkings

About that misterious way we used to test our reactions (each other's reaction)

Waiting for the reflection that come and goes

Waiting for the last tic in the clock

Viaje

Calles de asuntos pendientes
pesan los pasados
llenos de humo
sangre
alcohol
latidos
No hay amigos
o están desvencijados
en un rincón que huele a humedad y nostalgia
los dolores se reproducen en distintas partes
en distintos cuerpos
la luz salpicada se escurre del camino mal alumbrado
mal disfrazado —también— de escape
los ojos que enfocan con dificultad
la boca seca
el sol despierta
el horizonte se quiebra.

De tatuajes, cicatrices y otros mejunjes.

Que equivocados están aquellos que reducen el sentido del tacto a sólo esas torpes manos con que contamos.

El tacto está en la piel. Se siente con la piel, que cubre toda la extensión de nuestro cuerpo, con la mente y la memoria; incluso si quiere verse en un tono más rosa, se siente hasta con el músculo cardiaco, pues finalmente son estos, elementos que fungen cómo extensiones del sentir. Permitiéndonos llevar a cuestas frases, momentos y acciones que inequívocamente nos marcan; ya para bien, ya para mal, ya para regular.

Esas marcas, físicas o virtuales son la herramienta con que erguimos monumentos al sol y a los profetas… Monumentos a lo desconocido.

Decisiones, acciones y reacciones siempre con consecuencias de igual magnitud pero sentido inverso. Marcas que nos van forjando, que nos aflojan la piel y nos estiran los ánimos y las ánimas...

De entre las cosas que se recuerdan con más gusto, siempre está el sentir.

Humareda

Dar "El golpe".

... El cigarrillo sabe exactamente cómo la primera vez;

marea.

Es origen y fin de diluciones/construcciones/mutaciones mentales

es una noche,

una luna,

una letra,

un camino con un perro anhelante y un árbol a la expectativa.

Doce meses se retuercen

sobrevivir a las heladas

una a una, van las horas que sucumben

haciéndonos ganar tiempo

y perder vida

sobrevivir a las veladas.

Deformar siempre realidades subjetivas

y ajenas

y nocturnas

esquizoides y exquisitas

y lejanas.

¿Y qué si te distraes?

¿No es acaso la finalidad de un cigarrillo?

Recuento

Han pasado por mí infinidad de cigarrillos,

grandiosas borracheras,

mil días de lluvia,

... Muy pocas mujeres.

Padezco la misma enfermedad

que los que están alrededor,

de aquellos que a su vez,

son cercanos a mí:

(el amor, la tristeza, el temor,

la ansiedad, el rencor, la muerte),

... la existencia.

No hablo de ellos

pero sí imagino sus historias,

algunas más funestas

que esta inerme y lisiada realidad.

Han pasado por mí infinidad de cigarrillos,

grandiosas borracheras,

mil días de lluvia,

... Muy pocas mujeres.

Por supuesto...

Yo también he pasado por ell@s.

Dejé en el diván (al levantarme)

un pedazo de tezontle,

una deuda

y un columpio que tenía atascado en la memoria.

Piel muerta sobre piel viva

y dentro, un alma que danza (a veces)

con los días o la realidad

unos dentro de otra

y visceversa

piel viva debajo de piel muerta.

Secuestros, encuentros, desencuentros,

seducción, edades, certezas.

Casos pérdidos...

...

Deambular entre vestigios
extrañando a "J"
la conspiración y la paranoia necesarias
encontrar la clave que pronunciada sonará como llave.

Desdibujar soles con sueños de goma
insomnios de café y mentiras de piedad.

Ruido metálico irrisorio
11:11
y así sobreviví a las reglas
cargando a cuestas promesas necias.

Sinergia...
Vicios diluidos...